Hace tiempo que busco un escáner 3D que funcione bien y tras la prueba del escáner 3D Revopoint Mini al fin he dado con el escáner definitivo.

He invertido dinero y tiempo en encontrar un escáner 3D que realmente funcionase, probando desde el que incorpora el teléfono móvil Sony Xperia XZ1 Premium, hasta el terrible Phiz 3D.

El escáner del teléfono móvil funciona bien para objetos pequeños y muy básicos, captando bien las texturas y las proporciones, pero fallaba en resolución de detalles y no acertaba con las dimensiones.

O sea que, al menos, funcionaba y era bastante fácil de utilizar, aunque el resultado final no pasaba de nivel amateur, no apto para fines profesionales que exigen precisión.

Pero el Phiz 3D fue un completo desastre, ya que la malla no se formaba correctamente, el objeto escaneado no tenía las dimensiones correctas y su calidad de construcción era nefasta.

En la prueba del escáner 3D Revopoint Mini comprobamos su elevada calidad

En cambio el Revopoint Mini es todo lo contrario, tiene una elevada calidad de fabricación, es fácil de usar y, además, hace bien su trabajo.

El Revopoint Mini emite un haz de luz láser azul. El trípode es extensible en altura; y es muy práctico ya que también sirve de empuñadura para escanear a mano alzada.

Necesitas leerte bien las instrucciones, instalar en tu PC -o las app en el móvil- los tres programas Revopoint, Revo Calibration, Revo Scan y Revo Studio, y ¡ya está! El resto es bastante fácil.

En el unboxing ya os contamos todo lo que trae, el software y demás, así que hoy os contamos como nos fue nuestro primer escaneado.

Con el software instalado sacamos el cuerpo del escáner, lo anclamos al trípode, y conectamos el cable en su parte trasera y el otro extremo a un puerto USB 3.0 de nuestro PC o portátil -también puedes conectarlo a tu teléfono móvil y usarlo como si fuese el PC.

Esto es importante porque el escáner necesita velocidad de transmisión de datos y alimentarse de corriente del mismo puerto USB; en este punto es muy exigente.

Lo mejor es comenzar con el programa Revo Scan con los principales parámetros en automático

Lo ideal es escanear objetos utilizando la base rotatoria que trae, y colocar el escáner en su trípode, bien posicionado. Escanear a mano alzada requiere traza y paciencia.

El Revopoint Mini conjuntamente con la plataforma giratoria es ideal para escanear objetos con unas medidas de 10 x 10 x 10 cm, y que no tengan detalles de medio milímetro porque no los va captar, por mucho que digan que tiene mucha resolución.

También es recomendable que tengan superficies no uniformes, que no sean objetos planos sin detalle ni simétricos, vamos, que un cartón no lo escanea, a no ser que le coloques unos adhesivos circulares de patrón que trae el escáner. Si necesitas escanear una pieza grande, lisa -o simétrica sin texturas- y con poco detalle escoge la opción «Marker» en lugar de «Detail» y deberás colocar los adhesivos circulares que vienen con el escáner por toda la pieza.

Este es el interfaz del programa Revo Scan mientras escaneas el objeto.

Tampoco sirve para escanear objetos de vidrio, con superficies reflectantes o totalmente negros. Es mejor que sean ligeramente mates y opacos. Para objetos sin detalles o simétricos mejor usar la opción «marker» y pegarle los adhesivos circulares que vienen con el paquete.

Recomiendan lanzar el software Revo Calibration para calibrar el escáner, pero me dio problemas y se colgaba, así que pasé directamente al Revo Scan, pero es recomendable calibrarlo.

La luz azul que apreciamos en la prueba del escáner 3D Revopoint Mini permite que tenga una mayor resolución

Una vez allí, para comenzar lo mejor es dejarlo todos los parámetros en automático. Hay que prestar atención al centrado del objeto en el escáner y en la distancia del escáner a la pieza a escanear.

El mismo programa ya te advierte si estás demasiado lejos, demasiado cerca o estás bien situado, y también puedes ver el objeto a escanear en una ventana del programa, y la luz que recibe en una segunda ventana -procura que no se vean manchas rojas, porque significa que el objeto tiene demasiada luz.

Una vez comienzas el escaneado estático con rotación del objeto debes procurar que no haya variaciones de luz y de no mover ni el escáner ni el objeto.

Si quieres escanear la parte inferior del objeto, pausa el escaneado en el programa -los controles están a la derecha-, cambia el objeto de posición, y reanuda el escaneo.

Este es el interfaz del Revo Studio, para mejorar el acabado de la malla.

El software reconoce la nueva posición y añade la información al escaneado existente -aunque en ocasiones hemos comprobado que no lo realiza correctamente-. Es recomendable que realices un escaneado de una revolución; es suficiente para captar todos los detalles.

Una vez realizado el escaneo lo detienes -pulsa el botón de parado en el Revo Scan- y en la ventana emergente pulsas «Completo». Si no quieres realizar ningún cambio marcas «Fusionar puntos inmediatamente».

En cambio, si no marcas la opción «Fusionar puntos inmediatamente» puedes ajustar la malla con los pulsadores de la derecha de «Fusionar puntos» y de «Realización de la malla». Puedes ajustar los settings de cada apartado para conseguir un mejor resultado (máxima resolución y dejar a 3 el suavizado y corrección de errores). Tras ello ya puedes fusionar los puntos.

No es un escáner barato pero sus prestaciones son mucho mejores que otros escáneres que hemos probado

Verás que comienza una barra de progreso; cuando llegue al 100% ya estará malla formada. El último paso es exportar la malla -botón exportar abajo a la derecha-. La grabas en un directorio de tu PC -solo disponible en formato *.OBJ o en formato *.PLY.

Ahora solo te queda arreglar la malla con el programa Revo Studio. Lo abres, cargas la malla creada con el Revo Scan y la editas eliminando imperfecciones, cerrando huecos, suavizando la superficie, etc.

Deberás aprender a usar el Revo Studio porque es la única manera de que las mallas te queden perfectas para poderlas imprimir en tu impresora.

Cuando ya has acabado de arreglarla la grabas en formato *.OBJ o bien *. STL. y ya la tienes a punto para poder imprimirla o tomarla como base para diseñar la pieza por reverse engineering.

Aquí podéis comparar la pieza escaneada de 35 mm de longitud con el archivo *.OBJ resultante del escáner. Es el fruto de 4 minutos de trabajo y sin tener el programa por la mano…

En la prueba del escáner 3D Revopoint Mini Nos ha parecido uno de los mejores escáneres 3D que hemos probado, por su calidad, por los buenos resultados obtenidos y por la facilidad de manejo, aunque hay que leerse bien el manual.

Lo puedes encontrar en Amazon y ya te digo que vale lo que pagas por él. Por cierto, este escáner está comprado de mi bolsillo en la campaña de Revopoint en Kickstarter, por lo que no es ni cedido, ni regalado por la marca, ni he recibido ningún descuento, como es habitual en todos los productos que he ido probando a lo largo de los años.

Este Revopoint Mini ofrece resultados increíbles

PROS: está fabricado con materiales de calidad, las piezas escaneadas tienen las medidas originales del objeto, tiene bastante resolución, el software es bastante intuitivo, los accesorios de serie son correctos, el escaneado con detalle de un objeto pequeño en la base giratoria es muy rápido -en un par de minutos a lo sumo-, el precio es elevado pero lo vale.

CONTRAS: el programa Revo Calibration se cuelga, necesita una fuente de alimentación con un USB 3.0, escanear a mano alzada requiere atención, los objetos a escanear deben ser mates, no se recomienda para escanear caras, en ocasiones la malla no se forma correctamente.

La entrada Prueba escáner 3D Revopoint Mini, realmente vale lo que cuesta, ¡sorprendente! se publicó primero en impresion3daily.es.